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Zonas de la provincia como el Marquesado, Gor, Diezma, poblaciones de la comarca de Huéscar y Sierra Nevada recibieron ayer la nieve. En la estación granadina las precipitaciones fueron importantes y la nieve llegó a un espesor de casi 70 centímetros.
En puntos altos como el Puerto de la Mora, las nevadas fueron más débiles, aunque los camiones de mantenimiento de carreteras arrojaron sal durante buena parte del día. Durante la pasada noche se esperaban las nevadas más fuertes y las dificultades obligaron por la tarde a cortar de nuevo al tráfico el Puerto de la Ragua.
El fuerte viento que sopló en las zonas altas de Sierra Nevada, sólo permitió la apertura de nueve kilómetros de pistas en la estación de esquí. Según ha informado Cetursa, la empresa pública que gestiona la estación invernal, fueron abiertos por la mañana seis remontes en el recinto, donde la nieve, de calidad polvo, acumula espesores que llegaban anoche a los setenta centímetros. La superficie esquiable se concentraba en algunas zonas de Monachil, Borreguiles y Loma Dílar.
Como consecuencia de las últimas nevadas y de la producción artificial de nieve, la previsión de Cetursa era la de poder abrir a lo largo de este fin de semana 55 kilómetros de superficie esquiable.
El mal tiempo, con temperaturas bajas, hizo que por la noche la cota de nieve descendiera en puntos de la provincia. Durante la jornada el Puerto de la Mora fue cerrado en dos ocasiones debido a la acumulación de nieve, informó la Guardia Civil.
La nieve hace además obligatorio el uso de cadenas en la A-395, que conduce a Sierra Nevada, y en otras dos carreteras secundarias con escasa circulación -la A-4301 y la A-317, ambas en el término de Huéscar-, según las fuentes. La provincia de Granada permanece en alerta naranja desde la pasada medianoche, con previsión de nevadas en la Cuenca del Genil y las zonas de Guadix, Baza, Sierra Nevada y la Alpujarra.
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